John Better Armella, tú—que— me—excribes— … killing me softly with your song, ¡ay! … después de un largo rodeo, sorprendido, acaso sorprendida, te preguntas: ¿pensar es nadar en un verso hecho de agua? 

Nos dejas perplejos. ¡Perplejamos! Tememos naufragar en tus versos, ser ahogadas por esos líquidos que tratas de atrapar con tus manos abiertas, de orante babilónica. 

Como la vieja y endemoniada alma de Nietzche y sus acólitos con cachos, cola y aromas sulfurantes, modelas ser con versos, con escrituras ligeras y figuras ilegales libres como el agua. 

Modelar, ¡ay!, ¡modelar! … dejarse arrastrar por el verso de la otra, ahogarse en ella. Modelar quiere decir que quien piensa se pare a sí misma modelando su existencia. Pensar es asunto de versos que fluyen desde ese viejo olvido no olvidado aún hoy. 

La pensante da rodeos en torno a la marca que deja en ella la mutilación primordial, patriarcal. Hay diferentes maneras de apropiarse del líquido precioso de la escritura que fluye a través de esas cicatrices que vadeas como canales.

Imagino que los hablantes más inocentes nadan con nadadito de perro, tímidos y temerosos; los más sagaces enfrentan las mareas con vigor y triunfan sobre ellas como surfistas; los que tienen vocación de control, se sumergen en los profundidades de los versos y no los volvemos a ver en el mundo de los fluidos, de los vivos, ¡ay! … A distancia, sus traumas nos dominan… nos violentan…

Finalmente confabulo contigo, ¿qué es pensar? Intuyo que lo intuyes con la sutileza de la sibila, pero no te atreves a parecer poeta, no tienes el corazón pesado de dólares propio de los poetas de nuestros días. No tienes el descaro de lanzar la red maldita del lenguaje: dejas libre pensar, la dejas sin sujeto, libre, desujetada, sin señor ni dueño. Los poetas mediocres hacen lo contrario. ¡Bienvenida a la secta de Las Luciérnagas! 

8 de marzo, Día Internacional de las Mujeres, nada que celebrar: no ofendan, no tengan el descaro de mandar flores: ¡salgan a marchar con ellas por la igualdad! 

No al feminicidio, no a todas sus variantes de odio: el lesbocidio, el transcidio, el gaycidio… y al resto de plagas contemporáneas…